lunes, 14 de octubre de 2013

"Terror on Stage"

El jueves 31 de Octubre de 2013 a partir de las 8 de la tarde se pondrá en escena “Terror on Stage” (Terror en el escenario) en el salón de actos del I.E.S. “Maestro Fco. Fatou” por parte de los jóvenes que participan en el Taller de Teatro y Expresión Corporal “Tea Tre Ves?” y que cuenta con el patrocinio de las Concejalías de Cultura y de Juventud del Ayuntamiento de Ubrique (Cádiz) y la colaboración de Alter Ego Teatro.

La idea inicial parte de algunos de los propios chicos del taller de teatro que, con motivo de la controvertida fiesta de Halloween, desean aprovechar su participación en el grupo de teatro para realizar un montaje teatral dirigido al resto de jóvenes de la localidad y representarlo en ese día.

Cartel de la actividad
No es una obra de teatro al uso. Los chicos que deseen ver este montaje teatral, harán un recorrido en pequeños grupos por la sala de teatro (entrada, camerinos, escenario, patio de butacas…), acompañados de un guía que les irá mostrando una serie de escenas y personajes que habitan en el lugar y que han sido sacados de las más conocidas películas de terror de la historia y algunas otras sorpresas preparadas para la ocasión. Este espectáculo juvenil no se recomienda para menores de diez años.

En la puesta en escena participan unos veinte actores dirigidos por Diego Borrego Pérez, monitor del Taller de Teatro. Los diferentes personajes representados, con maquillaje y vestuario teatral, estarán distribuidos por unos quince espacios diferentes de la sala, que serán acondicionados con decorados, efectos de iluminación, sonido y música, así como pinturas realizadas en témpera y en graffiti por algunos de los componentes del taller de teatro. La entrada colaboración por persona es de 1 €, precio simbólico para cubrir algunos gastos.

Acerca de Halloween (información procedente de otras webs):
En un mundo tan globalizado, las tradiciones también traspasan fronteras. Y Halloween, con sus calabazas, sus dulces y sus terroríficos disfraces no iba a ser menos. Sus detractores argumentan la imparable “invasión” de las tradiciones importadas que, además, nos abocan a un mayor consumo (como ha ocurrido con papá Noel y su pulso con los Reyes Magos). Pero pese a ser Estados Unidos el epicentro de la celebración, vale la pena rescatar un dato que la mercadotecnia en la que se mueve no cuenta: el origen de esta fiesta es europeo, concretamente “made in Ireland”.

Y es que fueron los inmigrantes irlandeses quienes transmitieron las versiones de la tradición a América del Norte durante la Gran hambruna irlandesa de 1840 que los empujó a buscar una oportunidad en el continente americano.

Halloween o la Noche de Brujas es una fiesta que se celebra la noche del 31 de octubre. Tiene origen en la festividad celta del Samhain, el dios de la muerte, cuando celebraban el cambio del año, y dicen que también en la festividad cristiana del Día de todos los santos. De hecho, la palabra Halloween (pronunciado [ˈha.lo.wiˈn]) es una derivación de la expresión inglesa All Hallow's Eve (Víspera del Día de los Santos). Se celebraba en los países anglosajones, principalmente en Canadá, Estados Unidos, Irlanda y el Reino Unido. La fuerza expansiva de la cultura de EE. UU., y el hecho de ser una celebración que a los niños les encanta (disfraces y dulces) ha supuesto que Halloween se haya popularizado también en otros países occidentales.

Calabazas, dulces y miedo
Los irlandeses también difundieron la costumbre de tallar los Jack-o´-lantern (calabaza hueca con vela dentro), inspirada en la leyenda de Jack el tacaño, un malvado y astuto granjero que usó la cruz para engañar al diablo. A la calabaza, una vez calada o vaciada (actividad que suele desarrollarse en familia cuando no se compra ya preparada), se le pone una vela dentro para iluminar el camino de los difuntos.
Pero sin duda alguna lo que más gusta de esta celebración en naranja y negro y lo que hace que se expanda como la espuma, es su parte más dulce: el "trick or treat" (truco o trato) que invita a los niños a disfrazarse y pedir caramelos.

Basado en la leyenda popular de origen céltico de Jack el de la linterna, el espíritu malvado iba de casa en casa pidiendo truco o trato, y la leyenda asegura que lo mejor era hacer trato, porque si no el malvado haría truco, maldiciendo la casa y sus habitantes con toda clase se infortunios como matar al ganado con pestes. Aunque el truco, traducido así literalmente a lo que se refiere es más bien a un susto, por lo que la traducción más ajustada sería “dulce o susto/travesura”.

Los niños disfrazados según edades (los pequeños apuestan por princesas y personajes de cuento a diferencia de los mayorcitos que prefieren brujas, diablos, fantasmas y vampiros) van de puerta en puerta con su cubo con forma de calabaza en la mano. En él depositarán todos los dulces que les vayan los adultos al aceptar el trato cuando los pequeños pronuncien aquello de “trick or treat”. Se apunta que el recorrido infantil en busca de golosinas quizás tenga relación con la tradición neerlandesa de la fiesta de San Martín.